Criadero de curas

Esta novela, casi de iniciación, es una descarnada diatriba contra los internados religiosos y una crítica feroz a la intransigencia y al fanatismo que se derivan de los dogmas de fe. Sawa, furibundo anticlerical, nos muestra en este texto sus ideas acerca de la función social de la literatura: "hay que mostrar con toda la crudeza las llagas de la enfermedad para tomar conciencia de esta y procurarse el remedio".